Las mejores 100 frases de Oscar Wilde Tema: Citas & Frases

 

Oscar Fingal O’Flahertie Wills Wilde (1854-1900) fue un escritor, poeta y dramaturgo irlandés. En esta ocasión hemos recopilado más de cien frases de Oscar Wilde para que te deleites con su afilado ingenio.

Es considerado uno de los dramaturgos más destacados del Londres victoriano tardío; además, fue una celebridad de la época debido a su gran y aguzado ingenio. Hoy en día, es recordado por sus epigramas, sus obras de teatro y la tragedia de su encarcelamiento, seguida de su temprana muerte.

 

Citas célebres de Oscar Wilde

 

El hombre puede soportar las desgracias que son accidentales y llegan de fuera. Pero sufrir por propias culpas, ésa es la pesadilla de la vida.

 

Los viejos lo creen todo; los adultos todo lo sospechan; mientras que los jóvenes todo lo saben.

 

La experiencia no tiene valor ético alguno, es simplemente el nombre que damos a nuestros errores.

 

Soy tan inteligente que a veces no entiendo una sola palabra de lo que digo.

 

Sé tú mismo, el resto de los papeles ya están cogidos.

 

Siempre que las personas están de acuerdo conmigo, siempre siento que debo estar equivocado.

 

Cada uno de nosotros somos nuestro propio diablo, y hacemos este mundo nuestro infierno.

 

Sí: Soy un soñador. Un soñador es aquel que sólo puede encontrar su camino de luz en la luna, y su castigo es que ve el amanecer antes de que el resto del mundo.

 

Las pequeñas acciones de cada día hacen o deshacen el carácter.

 

Hoy en día la gente sabe el precio de todo y el valor de nada.

 

Lo menos frecuente en este mundo es vivir. La mayoría de la gente existe, eso es todo.

 

Vivimos en una época en que las cosas innecesarias son nuestras únicas necesidades.

 

Una sociedad se embrutece más con el empleo habitual de los castigos que con la repetición de los delitos.

 

El egoísmo no es vivir como uno desea vivir, es pedir a los demás a vivir como uno desea vivir.

 

Para la mayoría de nosotros la verdadera vida es la vida que no llevamos.

 

Para volver a mi juventud yo haría cualquier cosa en el mundo, excepto ejercicio, levantarme temprano y ser respetable.

 

La moda es una forma de fealdad tan intolerable que tenemos que modificar cada seis meses.

 

Algunos causan felicidad dondequiera que vayan; otros cuando se van.

 

Para la mayoría de nosotros, la vida verdadera es la vida que no llevamos.

 

Una cosa no es necesariamente cierta porque un hombre muera por ello.

 

El hombre es menos él mismo cuando habla en su propia persona. Dale una máscara, y te dirá la verdad.

 

¿Quién, siendo amado, es pobre?

 

Las mujeres han sido hechas para ser amadas, no para ser comprendidas.

 

Sólo podemos dar una opinión imparcial sobre las cosas que no nos interesan, sin duda por eso mismo las opiniones imparciales carecen de valor.

 

No existen más que dos reglas para escribir: tener algo que decir y decirlo.

 

Siempre traspaso los buenos consejos que me dan. Es para lo único que sirven.

 

Cuando la gente está de acuerdo conmigo siempre siento que debo estar equivocado.

 

El único encanto del pasado consiste en que es el pasado.

 

Las preguntas nunca son indiscretas. Las respuestas, sí.

 

Cualquier persona que viva dentro de sus posibilidades, sufre de una falta de imaginación.

 

Sólo las personas aburridas son brillantes en el desayuno.

 

El mundo llama inmorales a los libros que le explican su propia vergüenza.

 

En estos tiempos los jóvenes piensan que el dinero lo es todo, algo que comprueban cuando se hacen mayores.

 

Cada santo tiene un pasado y todo pecador tiene un futuro.

 

Siempre es bueno dar consejos, pero darlos buenos es fatal.

 

Sólo hay una cosa en el mundo peor que estar en boca de los demás, y es no estar en boca de nadie.

 

La risa no es un mal comienzo para la amistad. Y está lejos de ser un mal final.

 

Estoy convencido de que en un principio Dios hizo un mundo distinto para cada hombre, y que es en ese mundo, que está dentro de nosotros mismos, donde deberíamos intentar vivir.

 

Si nunca se habla de una cosa, es como si no hubiese sucedido.

 

Lo único que se conseguirá diciendo siempre la verdad es ser siempre descubierto.

 

Adoro los placeres sencillos; son el último refugio de los hombres complicados.

 

El hombre puede creer en lo imposible, pero no creerá nunca en lo improbable.

 

Nunca quieras a nadie que te trate como si fueras ordinario.

 

Me gustan los hombres que tienen un futuro y las mujeres que tienen un pasado.

 

Cuando me da por pensar de noche en mis defectos, me quedo dormido inmediatamente.

 

Ser natural es la más difícil de las poses.

 

La vida es simplemente un mal cuarto de hora formado por momentos exquisitos.

 

Resulta monstruosa la forma en que la gente va por ahí hoy en día criticándote a sus espaldas por cosas que son absolutamente y completamente ciertas.

 

La tierra es un teatro, pero tiene un reparto deplorable.

 

La belleza es muy superior al genio. No necesita explicación.

 

No se ama a alguien por su apariencia o su ropa, ni por su coche de lujo, sino porque canta una canción sólo uno puede oír.

 

Un buen amigo siempre te va a apuñalar por la parte delantera.

 

Estamos todos en la cloaca, pero algunos de nosotros estamos mirando las estrellas.

 

Experiencia es el nombre que damos a nuestras equivocaciones.

 

Cínico: un hombre que sabe el precio de todo y el valor de nada.

 

Sólo podemos dar una opinión imparcial sobre las cosas que no nos interesan, sin duda por eso mismo las opiniones imparciales carecen de valor.

 

Las mujeres tienen el propósito de ser amadas, de no ser entendidas.

 

No hay hombre lo bastante rico para comprar su pasado.

 

Si usted quiere saber lo que una mujer dice realmente, mírela, no la escuche.

 

La verdad raramente es pura y nunca simple.

 

Escojo a mis amigos por su buena apariencia, a mis conocidos por su carácter y a mis enemigos por su razón.

 

No quiero ir al cielo. Ninguno de mis amigos están allí.

 

No hay nada como el amor de una mujer casada. Es una cosa de la que ningún marido tiene la menor idea.

 

Se puede admitir la fuerza bruta, pero la razón bruta es insoportable.

 

Como no fue genial, no tuvo enemigos.

 

La educación es algo admirable, sin embargo, es bueno recordar, que nada que valga la pena se puede enseñar.

 

A veces pienso que Dios creando al hombre sobreestimó un poco su habilidad.

 

Un hombre que no piensa en sí mismo no piensa en nada.

 

Es bastante difícil no ser injusto con lo que uno ama.

 

A mí dadme lo superfluo, que lo necesario todo el mundo puede tenerlo.

 

Cuanto más conservadoras son las ideas, más revolucionarios los discursos.

 

Sólo los superficiales llegan a conocerse a sí mismos.

 

No soy tan joven para saberlo todo.

 

Los libros que el mundo llama inmorales son los que muestran su propia vergüenza.

 

Es curioso este juego del matrimonio. La mujer tiene siempre las mejores cartas y siempre pierde la partida.

 

Discúlpeme, no le había reconocido: he cambiado mucho.

 

Los solteros ricos deberían pagar más impuestos. No es justo que unos sean más felices que otros.

 

La única ventaja de jugar con fuego es que aprende uno a no quemarse.

 

Hay solamente una cosa en el mundo peor que hablen de ti, y es que no hablen de ti.

 

Perdona a tu enemigo. No hay nada que le enfurezca más.

 

Mejor ser un cohete caído que no haber resplandecido nunca.

 

Es absurdo dividir a la gente en buena y mala. La gente es tan sólo encantadora o aburrida.

 

Matar es una estupidez. Nunca debe hacerse nada de lo que no se pueda hablar en la sobremesa.

 

Cualquiera puede simpatizar con los sufrimientos de un amigo, pero requiere de una naturaleza muy buena el poder simpatizar con el éxito de un amigo.

 

Ninguna buena acción queda sin castigo.

 

Los hombres casados son horriblemente aburridos cuando son buenos maridos, e insoportablemente presumidos cuando no lo son.

 

La tragedia de la vejez no es que uno sea viejo, sino que uno es joven.

 

Es terriblemente triste eso de que el talento dure más que la belleza.

 

A veces podemos pasarnos años sin vivir en absoluto, y de pronto toda nuestra vida se concentra en un solo instante.

 

Un hombre puede ser feliz con cualquier mujer mientras que no la ame.

 

El arte de la música es el que más cercano se halla de las lágrimas y los recuerdos.

 

Amarse a uno mismo es el comienzo de un romance de toda la vida

 

En el arte como en el amor, la ternura es lo que da la fuerza.

 

No voy a dejar de hablarle sólo porque no me esté escuchando. Me gusta escucharme a mí mismo. Es uno de mis mayores placeres. A menudo mantengo largas conversaciones conmigo mismo, y soy tan inteligente que a veces no entiendo ni una palabra de lo que digo.

 

Ningún gran artista ve las cosas como son en realidad; si lo hiciera, dejaría de ser artista.

 

Si uno no puede disfrutar de la lectura de un libro una y otra vez, no hay ninguna necesidad de leerlo.

 

El trabajo es el refugio de los que no tienen nada que hacer.

 

Los niños comienzan por amar a los padres. Cuando ya han crecido, los juzgan, y, algunas veces, hasta los perdonan.

 

La ambición es el último refugio del fracaso.

 

El cinismo consiste en ver las cosas como realmente son, y no como se quiere que sean.

 

Como mala persona soy un completo desastre. Hay montones de gente que afirman que no he hecho nada malo en toda mi vida. Por supuesto sólo se atreven a decirlo a mis espaldas.

 

Uno debería estar siempre enamorado. Por eso jamás deberíamos casarnos.

 

La mejor manera de librarse de la tentación es caer en ella.

 

Aconsejar economía a los pobres es a la vez grotesco e insultante. Es como aconsejar que coma menos al que se está muriendo de hambre.

 

En el mundo común de los hechos, los malos no son castigados y los buenos recompensados. El éxito se lo llevan los fuertes y el fracaso los débiles.

 

Cuando se está enamorado, comienza uno por engañarse a sí mismo y acaba por engañar a los demás. Esto es lo que el mundo llama una novela.

 

Hay mucho que decir en favor del periodismo moderno. Al darnos las opiniones de los ignorantes, nos mantiene en contacto con la ignorancia de la comunidad.

 

La muerte debe ser tan hermosa. Para estar en la tierra marrón, con las hierbas que agitan por encima de la cabeza, y escuchar el silencio. Para no tener ayer, ni mañana. Para olvidarse del tiempo, para perdonar la vida, estar en paz…